En julio de 1870, Gaudí se entusiasmó, junto con sus amigos Eduard Toda y Josep Ribera, con restaurar el monasterio de Poblet, arruinado desde la desamortización de 1835 y de gran importancia cultural, histórica y patriótica. Gaudí dibujó el escudo de Poblet, copiándolo del grabado al cobre del libro del padre Jaume de Finestres. Gaudí omitió el capelo abacial y las correspondientes ínfulas trenzadas colgadas a los lados. Este dibujo de Gaudí está incluido en el manuscrito de Toda “Poblet, datos y apuntes”, de 26 de julio de 1870.